Florencia Bonelli: un capítulo aparte

Florencia Bonelli en particular, merece un capítulo aparte. ¿Por qué?

Porque Florencia Bonelli, fue la que me hizo volver a apasionarme con la lectura.

Llegó a mí estando en una librería viendo libros con mi hija. De pronto se acercó uno de los vendedores y me preguntó: “Señora, ¿La puedo ayudar?” Frente a mi estaba el libro “Las Indias Blancas”, y el joven rápidamente agarró el primer tomo y me dijo “¿Conoce a esta escritora?” A lo que respondí que no y el me contestó, “”Es una escritora adictiva, cuando empiece a leer la historia, no podrá dejarla””.

Así fue como me compré en ese momento los dos tomos y de aquí en más se cumplió lo que el vendedor había aseverado, pude experimentar la adicción. Pronto el diario “La Nación” comenzó a publicar su obra y fui adquiriendo uno a uno todos sus libros.

La característica fundamental de Florencia Bonelli, es que narra las novelas , ambientándolas de tal forma que te transporta a la época haciendo que el lector experimente los sonidos, los olores, las voces y sienta lo que el personaje siente.

Los personajes tienen un denominador común, en el caso de los hombre son esbeltos caballeros, viriles, de carácter dominante, posesivos, corpulentos y poderosos. Las mujeres, tienen también carácter, pero a la vez, son bellas, dulces, atractivas, de espíritu guerrero, y cuando ellos se encuentran se despierta una pasión descontrolada. Mas allá de mi admiración, creo que abusa un poco de la descripción de estas pasiones sexuales, pero, como siempre hay un pero, la historia que narra, siempre, siempre, tiene un trasfondo insuperable.

A medida que fui avanzando en la lectura de su obra, cada vez me costaba más abandonar los libros. Por ello certifico que leerla es adictivo.

Dicho esto, iré reseñando sus libros, pero desde ya, para las lectoras románticas, sera un placer adentrarse en las novelas y acompañar a los personajes hasta la última página.

Debo confesar que cuando llegué a su último libro, trate de extender el disfrute, alargando la lectura, pues sabía que después de éste, no había nada más.

Realmente me gustaría que me cuenten su experiencia una vez leída, para conocer si lo que me provoca, es compartido con otros lectores.

Les dejo un saludo, y hasta la próxima.